Los barcos pequeños abren 2018 con menores capturas de verdel y merluza

En esta ocasión las rebajas se han producido en donde más le ha podido doler a la flota de bajura, el verdel y la merluza, dos especies de gran importancia para estos barcos. Ese descenso, tras las largas negociaciones en las que se partía de una propuesta aún mas dura, ha quedado fijado en un 21,5 por ciento para el primero y en un 15% por ciento para el segundo.

Según los arrantzales, «este acuerdo lo vamos a padecer mucho, especialmente la flota pequeña que es la mas numerosa y la que menos recursos tiene, los barcos mas grandes no se han visto tan perjudicados al aumentar la cuota en otras especies que para ellos también son importantes como es el bonito o el chicharro y al mantenerse la de la anchoa» ha señalado. El recorte en el verdel es una decisión que resulta especialmente incompresible para los marineros porque, a diferencia de lo que pasa con otras especies, ven claramente que no hay un problema en la biomasa de esta especie. «No hay ninguna razón para esta reducción, hay todo el verdel que se quiera», señalan los pescadores. En este contexto como es lógico ya se están pidiendo medidas compensatorias, porque la situación puede ser muy difícil para muchas familias y pequeñas empresas, algo que desgraciadamente en el sector de la pesca pocas veces llega a materializarse.

El verdel y la merluza se mantienen con mucha diferencia como las especies mas importante para estos puertos. Así, la asignación para la merluza pasará de 8.848 toneladas a 6.946. Otra bajada importante está en el tope para el verdel, en un 15 %, aunque se apuntaba un recorte del 40%, mientras que en el caso de la bacaladilla, cuya cuota está vinculada a las negociaciones con Noruega, se ha logrado mantener unas capturas similares.

En cuanto a la flota de altura de Ondarroa, se ha logrado aumentar al 19% las capturas de merluza, 27.764 toneladas, un máximo histórico. En el caso del gallo norte, con un aumento del 5% (6.483 toneladas), invierte totalmente la tendencia de muchos años de recortes. Por lo que respecta al rape en las aguas de Irlanda y Golfo de Vizcaya, España ha logrado mantener la cuota de 2015 (unas 2.600 toneladas), frente a la propuesta inicial de Bruselas de reducción del 12%.