Charla sobre dislexia y presentación de la recién creada asociación Dislegi

Dislegi, como destaca en su declaración de intenciones, nace para apoyar a las personas disléxicas en Gipuzkoa y como respuesta al número creciente de familias que demandan apoyo en todo lo relacionado con el ámbito de la dislexia, «la asociación se ha constituido para atender a esa necesidad y emprender proyectos nuevos», apuntan desde el colectivo que preside Ana María Cabezas Campo.

Lo primero que plantea la asociación es una definición de la dislexia como un trastorno que afecta las habilidades lingüísticas asociadas a la lectura y a la escritura, especialmente a la discriminación fonológica, la memoria a corto plazo, la decodificación, la secuenciación fonológica y la percepción de los rasgos de las letras.

Recuerdan que existe en todas las culturas y en toda la gama de capacidades y condiciones socioeconómicas, «se trata de una condición del desarrollo neurológico hereditario y para toda la vida, que se manifiesta fundamentalmente como una dificultad significativa y persistente de la automatización de la lectura, problemas con la ortografía y con el cálculo aritmético. Y también por las dificultades para comprender el mensaje de un texto y para expresar verbalmente sus conocimientos».

Y con la intención de anular falsas creencias recalcan «no es discapacidad intelectual o sensorial, ni falta de motivación o atención, ni de madurez, ni consecuencia de un problema emocional, y tampoco un retraso que se supere con la madurez».

Dislegi, como lo hará hoy en la villa, se ha marcado la intención de dar a conocer a la sociedad qué es la dislexia y cómo se puede prevenir, tratar y mejorar. Además apuestan por ofertar formación a profesorado y ámbitos implicados para detectar y mejorar la dislexia, para intentar garantizar el éxito académico de estas personas, y solicitan al sistema educativo y otros ámbitos que dote a las familias y profesionales de herramientas para dar respuesta a las necesidades de la infancia, adolescencia, juventud y personas adultas con dislexia.