¡Vuela, Dapena, vuela!

Pero Dapena, que compite con la la Real Sociedad, y que entrena a caballo entre Donostia y Arrasate, tiene por delante una intensa agenda competitiva. Dentro de dos semanas participará en el Campeonato de Euskadi Absoluto, y seguido la final de la Liga con la Real, el campeonato por Federaciones, el de España Promesa y el Absoluto estatal. El Europeo tendrá lugar en Bydgoszcz (Polonia) del 13 al 16 de julio.

A pesar de que la alegría y buen sabor de los 5,25 metros es reciente, el pertiguista sigue soñando, sigue trabajando para continuar su carrera deportiva apuntando a lo más alto. «Quiero entrar en la final del Campeonato de Europa saltando los 5,30 o 5,40 metros y obtener el récord de Gipuzkoa absoluto que posee actualmente Jon Karla Lizeaga».

No hay duda de que Dapena está en su mejor forma física y deportiva y que su motivación es máxima. Solo espera que «no toque ninguna lesión y pueda participar en todos los campeonatos».

Con 13 años descubrió el atletismo pero como él señala, no era lo suficientemente rápido para ser velocista, ni obtenía buenas marcas en saltos horizontales, era atleta para la pértiga, y con ella ha logrado destacar, una modalidad exigente donde las haya, en la que el atleta debe ser rápido, fuerte, valiente y hábil. A pesar de competir con la Real Sociedad, los entrenamientos son 'en petit comité', junto a su entrenador Jonathan Pérez y su compañera Malen Ruiz de Azua. En Mojategi no faltan tampoco Iñigo Uribarren, Eneko Carrascal y un sin fín de compañeros de Arrasate Kanpanzar Atlético, el club que ha visto y ve nacer a promesas del atletismo guipuzcoano y nacional.

Un año antes de su muerte, la mexicana Frida Kahlo escribía: «Pies para que los quiero, si tengo alas para volar». Más de sesenta años después, y en un contexto bien diferente habría que ver si Dapena tiene alas, porque está claro que volar, vuela alto.