«Por menos de 3.000 euros al mes no merece la pena ser prostituta»

La crisis va haciendo mella en los diferentes sectores, sin embargo, algunas profesiones pueden considerarse agraciadas por haber percibido de una manera muy sutil que muchos se hayan tenido que apretar el cinturón. La prostitución es una de ellas.

Si hace unos años podíamos hacer 16 clientes al día, hoy hacemos unos 12, comenta una de las profesionales de esta área. Sin un atisbo de duda, Vivian, encargada del Yokin Club, asegura que tenemos los mismos clientes, solo que ahora gastan menos dinero cada vez que vienen; eso sí, estoy convencida de que la crisis provoca que la gente necesite desahogarse.

Otra de las chicas que trabaja en este local de Donostia apunta que los hombres buscan dentro de un club lo que no tienen fuera. Sin embargo, esta afirmación en la que, tanto la encargada del club como las dos chicas coinciden, no se refiere exclusivamente al sexo.. todas coinciden en señalar que la mayoría de hombres que acuden a una casa de citas lo hacen solo para hablar.