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Tres monjas jóvenes asisten a la celebración de una misa en Roma. /REINARD KRAUSE /REUTERS
Suspenden el concurso 'Miss monja'
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Suspenden el concurso 'Miss monja'

Un sacerdote pasionista italiano se ve obligado a cancelar, al poco de convocarlo en internet, un concurso para elegir a la monja más guapa

RUTH CAMPION

Martes, 26 de agosto 2008, 03:52

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ruth campion

Aquienes conocen al teólogo italiano Antonio Rungi no les había extrañado la idea. El sacerdote pasionista que ejerce su magisterio sacerdotal en la localidad campana de Mondragone era, hasta ahora, el dinamizador de iniciativas tan sorprendentes como el rezo del rosario en la playa con dos cabinas de baño transformadas en sacristía. Su última idea ha sido tan explosiva como breve. Don Antonio organizó a través de internet el primer concurso La monja más bella del mundo 2008. Ésta vez se le han echado encima desde los fieles hasta las autoridades eclesiásticas y civiles y ha tenido que dar marcha atrás.

A las cuarenta y ocho horas de haber lanzado la convocatoria en la red, Don Antonio Rungi ha decidido cancelarla porque el asunto «se estaba convirtiendo en un caos». De todos modos, en cuestión de horas la solicitud del pasionista había recibido numerosas adhesiones y, por supuesto, varias solicitudes para participar en el concurso. El religioso, en las bases de participación, únicamente pedía que la monja aspirante remitiera una fotografía a la dirección que se facilitaba en la página y, una vez comprobada la autorización de la remitente, aparecería en el sitio de internet en el que se anunciaba el concurso. Las monjas participantes debían rellenar un perfil incluyendo información sobre su vida y vocación, así como una fotografía. Dependería de ellas si querían posar con el velo tradicional o con la cabeza descubierta. Rungi dijo que la idea se la sugirieron algunas monjas «con las que reza y trabaja regularmente». «También en los conventos -añade el sacerdote pasionista- viven jóvenes bellísimas que no por haber hecho sus votos a Dios dejan de serlo». «No íbamos a hacer desfilar a las monjas en traje de baño -manifestó- pero ser fea no es un requisito para convertirse en monja. La belleza externa es un regalo de Dios, y no debemos ocultarlo», agregó.

Pero no ha podido ser. «He tenido que pararlo porque, junto a las adhesiones de buena fe ha habido otras muchas que han decidido especular malintencionadamente con una inciativa inocente». Tras dar por cancelado el concurso, el padre Rungi ha manifestado que «algunos me han injuriado y amenazado seriamente asegurandome que acabaré en el infierno». El concurso Miss Sister 2008 hubiera comenzado en septiembre en el blog operado por Rungi y «hubiera dado a las monjas de todo el mundo una oportunidad de mostrar su trabajo y su imagen», dijo el sacerdote.

Las mayores críticas han llegado desde la Asociación de Maestros Católicos (Rungi es también maestro de escuela). «Es una iniciativa -dicen- que resta importancia al papel de las monjas, que se han entregado a Dios». n

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