Ratifican la expulsión de los electos jeltzales de Ondarroa que renunciaron

GERNIKA. El Tribunal Nacional del partido que dirige Iñigo Urkullu ha expulsado definitivamente de sus filas a seis de los nueve electos que el pasado mes de junio decidieron no recoger sus actas de concejales para constituir el Ayuntamiento costero ante las amenazas y presiones de la izquierda abertzale. Los otros tres no están afiliados a la formación jeltzale. Los seis afectados por la drástica medida disciplinaria son el ex alcalde de la localidad Aitor Maruri, la juntera Miren Urresti, así como María Dolores Etxano, José Antón Urresti, Juan Mari Etxaburu y Miren Solabarrieta.

El pasado mes de diciembre, el Tribunal Regional del PNV decidió expulsar a sus electos tras la denuncia presentada por una afiliada de Galdakao. Los afectados recurrieron la medida, pero sus argumentos no han fructificado y su marcha es definitiva. En su defensa, recalcaron la dedicación y el trabajo realizado por Maruri y su equipo durante más de una década en una de las localidades más conflictivas y «duras» del País Vasco.

Maruri había formado parte de la facción del partido que intentó impedir que Urkullu accediera a la presidencia del Bizkai Buru Batzar. El ex alcalde de Ondarroa, que estuvo en la lista alternativa a la de Urkullu que encabezó el anterior mandatario municipal de Getxo, Iñaki Zarraoa, seguidor de la línea de Egibar, recibió duros reproches por intentar negociar hasta el último momento con ANV -cuya lista había sido ilegalizada- para canalizar de alguna manera su participación en el Ayuntamiento de la villa.

Tras conocerse la decisión definitiva del órgano interno jeltzale, los expulsados de Ondarroa han optado por guardar silencio. «Prefiero no comentar nada», indicó Miren Urresti. En la misma línea se expresó Maruri. «No he hablado nunca acerca de este tema y ahora tampoco lo voy hacer», recalcó. La Junta Municipal del PNV también ha acatado la decisión, aunqude miembros de la organización local no ocultan su malestar. «Hay que estar aquí para saber cómo es esto», asfirman. No obstante, la junta ha anunciado su intención de poner en marcha todos los mecanismos posibles para «resolver» la situación. «No sabemos de qué manera, pero trataremos de que la medida no sea definitiva», manifestó la presidenta de los jeltzales ondarreses, Beatriz Zubikarai.

No obstante, fuentes cercanas a esta formación han asegurado que la decisión ratificada por el Tribunal Nacional del partido «es inapelable». «Ha primado el castigo a la desobediencia que en su día cometieron Maruri y su equipo», declararon cargos internos. De hecho, la expulsión fue dictada por un tribunal presidido por Félix Aranbarri, situado en la actualidad como cabeza visible de la gestora creada para garantizar la gobernabilidad del Consistorio vizcaíno.