El Bruesa gana cuando deja a su rival en menos de 80 puntos

SAN SEBASTIÁN.DV. Está costando lo suyo convencer a los jugadores del Bruesa de la necesidad de cimentar sus opciones desde un aguerrido trabajo sin balón. La liga regular está llegando a su fin y todavía hay momentos -la primera parte en Santiago, el pasado miércoles, o minutos del tercer cuarto ante La Laguna, el domingo- en los que parece que el partido no va con ellos. Ejemplos como el último ante La Laguna demuestran que por mucho talento que se tenga, en la LEB como en otras ligas, no hay otra forma mejor de avanzar que desde la defensa.

El repaso a la trayectoria del Bruesa esta temporada dice que más del 75% (16 de 21) de sus victorias han llegado cuando ha sido capaz de dejar a su rival por debajo de la barrera de los ochenta puntos, o lo que es lo mismo, cuando ha logrado encajar una media de veinte puntos o menos por cuarto de partido. No hay otro secreto.

No basta con ser superiores en nombre. Para ir un paso por delante hay que mostrarse firmes atrás. Es el camino a seguir. No sólo en las siete jornadas que restan. Hay que mirar más allá. Raro será que el play off y la posterior Final Four se decida a la carta más alta. La lógica dice que se lo llevará el equipo que mejor haga los deberes atrás. Como tampoco tiene pinta de que en las siete jornadas que restan, en el mano a mano entre el CAI Zaragoza y el Bruesa, haya algo más importante que mantener la concentración y la actitud. Que se lo pregunten al Alicante. Perdió el domingo en Huelva y su entrenador, Quim Costa, lejos de achacar la derrota a la mala actuación de Dumas, Fisher o Carroll, entre otros, echó en cara a los suyos la falta de concentración y esfuerzo: «Del pasado no se vive, y menos en el deporte profesional. El baloncesto es un deporte de equipo, de gente que quiera luchar y trabajar, no de la que pueda vivir de renta».

Partidos que ejemplifiquen la necesidad del Bruesa de dejar a su rival con tanteos bajos hay tantos como dieciséis esta temporada. Como también hay seis derrotas que se acercan bastante a lo que no debe hacer en lo que resta de temporada: Tenerife (108), La Laguna (89), Los Barrios (79), Palma (76), Breogán (83), y Alicante (79) consiguieron superar o acercarse a esa barrera de los ochenta puntos y el Bruesa acabó perdiendo.

Porque pese a que Laso y los suyos también han sido capaces de aguantar e incluso ganar partidos a un elevado ritmo de anotación -Breogán (100-97), CAI (93-83), Rosalía (96-87), CAI en Zaragoza (89-94) y Rosalía en Santiago (88-90)- cinco ejemplos en una temporada de veintisiete jornadas no deben esconder la necesidad de defender siempre al máximo. Otra cosa sería negar la realidad. De atrás hacia adelante. No hay otra forma más lógica y evidente para avanzar hacia la meta.