Primer aperitivo de Santamasak

ARRASATE. DV. Las Santamasak calentaron motores ayer en Arrasate antes del gran alarde festivo del 22 de diciembre, día en el que la villa cerrajera se convierte en un paraíso del ámbito rural, orquestado por numerosos concursos de verduras y hortalizas frescas, puestos de quesos y feria de ganado. Como preludio festivo, ayer tuvo lugar en el municipio la trigésima edición del cross Santamasak, con la que a su vez, se conmemoraba el quinto aniversario en recuerdo del fallecido atleta y corredor arrasatearra Enrique Kabiketa. Decenas de niños y mayores se atrevieron a desafiar las frías temperaturas de la mañana y fieles a la tradición, completaron el recorrido trazado a lo largo y ancho del casco urbano. A mediodía, la banda de Txistularis de Arrasate Musikal ponía la nota festiva de la jornada con un concierto especial en el salón principal de la Casa de Cultura.

Y como colofón, a las seis y media de la tarde daba comienzo en la Herriko Plaza la décimo primera edición del concurso de baile al suelto por parejas hasta los dieciséis años. Un certamen que, tras varios años de pausa, ayer volvió a hacer las delicias de dantzaris y familiares, que pese al frio allí se mantuvieron. Un total de doce parejas de jóvenes mostraron soltura y desparpajo interpretando el fandango y el arin arin ante un nutrido grupo de espectadores. Bajo las tablas, el espectáculo estuvo servido de la mano de los más pequeños que, intentando imitar a los dantzaris, realizaban su particular danza de giros y trompicones.

Al ritmo de la trikitixa y el pandero, se despidió el primer entrante festivo.