Koka y Galarza V se la juegan hoy en Basauri

SAN SEBASTIÁN. DV. Juantxo Koka y Enrike Galarza afrontan la eliminatoria de esta tarde en el frontón Artunduaga de Basauri con un único objetivo; lograr el billete para la ronda de octavos de final del Campeonato del Cuatro y Medio. El vencedor se medirá al ganador del Gonzalez-Leiza que se disputa mañana en el Astelena de Eibar. El festival comienza a las 20:00 y se completa con un partido de parejas en el que los hermanos Olaizola son rivales. Aimar juega con Mendizabal II y Asier con Zearra.

Por categoría y experiencia, el altzatarra parte como favorito. Koka se presenta tras rematar un buen verano en San Mateo. Ha acabado el periodo estival con las manos en perfectas condiciones y ha tenido tiempo suficiente para preparar el campeonato. Su rival no puede decir lo mismo. Enrike Galarza arrastra desde hace tiempo problemas en la espalda y no ha podido entrenarse todo lo que hubiera querido. A pesar de todo, no ha perdido la ilusión y sueña con clasificarse para octavos de final, logró que ya consiguió en 2006 al eliminar a Agirre.

Un partido inédito

A pesar de que ambos delanteros son veteranos, nunca han medido sus fuerzas ni en la jaula ni en el mano a mano. Por lo tanto, se trata de un partido inédito. El de Baraibar tratará de buscarle la izquierda a Koka, su punto débil, dominar el peloteo y alargar el tanto. Al altzatarra, en cambio, no le gusta demasiado enzarzarse en el peloteo, aunque se vea obligado a hacerlo. Prefiere acabar el tanto cuanto antes. Tiene recursos suficientes para hacerlo. Por algo le llaman artista.

Al tratarse de dos delanteros, el saque tendrá mucha importancia y puede decidir el partido a un lado u otro. Ni Koka ni Galarza V son consumados restadores.

Asegarce tiene con Koka la ocasión de resarcirse de los resultados cosechados por sus pelotaris en las primeras eliminatorias de dieciséisavos. Sólo Agirre consiguió pasar de ronda. En el camino se quedaron Esain, Chafee y Arretxe II. Aspe, por su parte, espera que la racha continúe tras las alegrías dadas por Mikel Goñi, Del Rey y Berasaluze IX.